¡Sé el primero en enterarte!
Ser abuelo es una segunda oportunidad para amar, con un amor maduro y generoso, pero también, ¡responsable!*
Ser abuelo es sinónimo de consentir. Cuando por consentir entendemos disfrutar y gozar a los nietos para que se sientan queridos incondicionalmente, entonces es algo positivo que nutre sus vidas emocionales.*
Pero cuando consentir significa dar sin medida, no poner límites, permitir las faltas de respeto o contradecir a los padres, entonces echamos a perder al nieto.*
Te invito a reflexionar y desechar viejos patrones de educar que hacen daño, y a poner límites personales para cultivar una relación sana entre padres, abuelos y nietos.*